El Quijote en naipes
Presentación de la autora:
EL QUIJOTE EN NAIPES es el resultado de una inspiración de antaño, pero como todo llega para el que sabe esperar, tres lustros después ha podido ver la luz gracias a los múltiples apoyos recibidos con motivo del 400 aniversario de la publicación de la segunda parte de El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha (1615-2015).
Se trata de una baraja de cartas con 42 naipes y la característica singular de contener breves párrafos de la obra literaria. Cada naipe es único, hecho a mano en un tamaño de 20,5 x 14,5 cm., utilizando una mezcla de materiales de ayer y hoy: pluma y tinta de tintero, colores a pastel y bolígrafo para dibujo técnico. El diseño es fruto de mucha meditación e imaginación por hacer algo diferente, fuera de lo tradicional, original.
La baraja está formada por cuatro palos donde, versus la baraja tradicional española, son oros las PLUMAS de escritura, pues de la dorada pluma de Miguel de Cervantes salió tan inmortal obra; copas son los CUEROS DE VINO, en recuerdo a la batalla, brava y descomunal que en la posada librara el de la triste figura; espadas las LANZAS, pues con tal arma el hidalgo caballero batalló contra enemigos imaginados, y bastos las ASPAS DE MOLINO, pues delirio era confundirlas con brazos de gigantes, la locura más sonada del caballero andante.
Preciso aclarar sobre el título de la obra un doble significado, ya que escrito tal que así: El Quijote en naipes, no cabe duda que se refiere al conjunto completo de naipes empleados para juegos de azar a los que, al parecer, el propio Cervantes era aficionado como muestra en su obra, utilizando un léxico propio de los mismos. Ahora bien, si el título se escribe de este otro modo: El Quijote en Naipes, bien podría parecer Naipes un lugar para tener en cuenta y citar tal que así: “De las extrañas cosas que sucedieron a Don Quijote y su escudero Sancho Panza en Naipes”.
Para terminar quiero decir que el camino a ese preciso lugar ya ha comenzado. Si bien la obra original, Don Quijote de la Mancha,no necesita más añadidos, anexos o pegados, quién sabe lo que puede suceder si la osadía de la atrevida autora de esta baraja se desborda del poco dormir y mucho leer, se le daña el cerebro y desvía el juicio.
Muchas gracias a la Facultad de Filología de la Universidad Complutense de Madrid, por ser cálida posada en la ruta a Naipes.