Biblioteca Complutense

El inframundo y sus dioses en Grecia y Roma

El inframundo clásico, gobernado por Hades/Plutón, era un espacio complejo donde las deidades no solo simbolizaban la muerte, sino que encarnaban principios éticos, jurídicos y cosmológicos. Los dioses del inframundo actuaban como gobernantes, jueces y guardianes de un orden que reflejaba las expectativas morales de Grecia y Roma. Hades destaca por ser el dios del inframundo, aunque su culto era muy limitado por el miedo a atraer la muerte. Su unión con Perséfone, a través del rapto de la hija de Deméter, diosa de la agricultura, simbolizaba el ciclo estacional y la interdependencia entre el mundo ctónico y el terrestre. Los meses que Perséfone pasaba con su madre en la superficie, la tierra era fértil, mientras que el periodo del año en que reinaba en el inframundo, esta se volvía estéril.

El inframundo evolucionó desde una visión homérica en la que los difuntos vagaban como sombras sin conciencia hasta un espacio de juicio moral, donde Minos, Radamantis y Éaco evaluaban las acciones de los difuntos. En función de los actos llevados a cabo en vida, los finados podían acabar en un lugar más o menos luminoso del Más Allá.

Es relevante también la figura de Thanatos (la Muerte), hermano gemelo de Hypnos (el Sueño), hijos ambos de Nyx (la Noche), como deidad menor relacionada con la muerte, cuya personalidad quedó eclipsada por las de Hades y Hermes. Las Moiras, también hijas de Nyx, fueron divinidades que gozaron de un rico culto ya que se creía que tejían el destino de los hombres. Al romperse el hilo, la persona moría irremediablemente.

El legado de estas deidades trasciende al cristianismo, donde figuras como Hades se reinterpretaron como Satanás, y el juicio de las almas influyó en el concepto del Juicio Final. El inframundo clásico, a través de mitos, rituales y arte, transformó lo desconocido en un espacio ordenado, reflejando los valores éticos y la visión del mundo de las sociedades antiguas.


Tumba macedónica en la que se representa a Radamantis y Éaco, 325-300 a. C.


Relieve que representa a Hades y Perséfone entronizados, 500-450 a.C., Cleveland Museum of Art.


Crátera ática de figuras rojas en la que se representa a Hynos y Thanatos llevando el cuerpo de Sarpedón, 515 a. C., Metropolitan Museum of Art.