La Universidad Complutense de Madrid en los siglos XIX y XX
Este apartado de la Exposición no pretende hacer un repaso exhaustivo de la historia de la Universidad Complutense de Madrid, sino mostrar una serie de documentos significativos. En el mismo año de 1842 en que la Universidad, con sede provisional en el convento de Salesas Nuevas en la calle de San Bernardo, recibe el ofrecimiento del antiguo edificio del Noviciado de los Jesuitas en la misma calle, y se pone en marcha su reforma, se elabora e imprime también el primer proyecto de Reglamento para el gobierno interior, que trata detalladamente de los cargos, del claustro, de la disciplina, los estudios, las cuestiones de orden interno, los exámenes, los grados, la biblioteca, el ceremonial y el personal. Si este Reglamento llegó a estar vigente debió ser por muy poco tiempo a causa de los cambios políticos.
El Plan de estudios de Pedro José Pidal, decretado en 17 de septiembre de 1845, es una de las piezasclaves de la reforma de la enseñanza: establece una continuidad entre la enseñanza secundaria y la superior, unifica los estudios en las Universidades del Reino, y crea para la de Madrid las Facultades de Filosofía, Teología, Jurisprudencia, Medicina y Farmacia, estableciendo las cátedras de cada Facultad. Estará vigente, con algunas reformas, hasta la ley de Instrucción Pública de 1857.
En 1850 un decreto amplía las enseñanzas de algunas Facultades, en especial la de Filosofía, y se vuelve a denominar Central a la Universidad. Siguen varios Reglamentos interiores, y aquí podemos ver manuscrito el de 1853, bastante detallado, dividido en cinco secciones en las que destacan las dedicadas al gobierno general de la Universidad y al régimen interior.
Desde 1855 se publicaron los Anuarios de la Universidad Central, y desde el curso 1859-60 las Memorias, que continuaron durante todo el siglo XIX y parte del XX.
Tras la revolución de 1868, se inicia una de las publicaciones más valiosas y duraderas de la Universidad de Madrid: su Boletín-revista, cuyo número 1 lleva la fecha de 10 de enero de 1869. "La Universidad de Madrid cree llegado el caso de tener en la prensa un órgano genuino, no solamente de las nobles aspiraciones de su Claustro, sino también de las más elevadas de la ciencia", se expresa en el prospecto, donde se hace cumplida manifestación de liberalismo; y firma su primer artículo Nicolás Salmerón. La Revista de la Universidad de Madrid, que ha llegado hasta nuestros días, es sin duda una de las publicaciones periódicas científicas españolas de más solera.
Desde la década de los cuarenta se publican regularmente los discursos de apertura del año académico. Aquí mostramos dos ejemplos: uno, también en plena efervescencia revolucionaria, del Rector don Fernando de Castro, sobre la libertad de la ciencia, en 1868, y otro del catedrático (y luego también Rector) don Pío Zabala y Lera, sobre la autonomía universitaria, en 1919. El Estatuto que se aprobaba por los mismos días en que se leyó el discurso establecía en su primer artículo la autonomía de la Universidad de Madrid.
La obra de la Ciudad Universitaria, proyecto personal del Rey don Alfonso XIII a partir de 1911, desarrollada sobre todo desde 1927, el tremendo desastre de la guerra civil, la universidad de postguerra y finalmente la autonomía universitaria, serían los hitos destacables con que podría finalizarse esta Exposición.