Heinrich Scherer
Heinrich Scherer, 1628-1704
El jesuita Heinrich Scherer (1628-1704) fue profesor de hebreo, matemáticas y ética de la Universidad de Dillingen hasta 1680 y más tarde tutor de los Príncipes Reales de Mantua y Baviera. Durante su estancia en Munich desarrolló su trabajo como cartógrafo recibiendo grandes elogios y reconocimiento. Su obra póstuma Atlas Novus, publicado por primera vez en Munich entre 1702 y 1710 y reeditado entre 1730 y 1737, constituye un trabajo colosal de enorme influjo en el desarrollo de la cartografía europea del siglo XVIII pues con esta monumental obra puso los cimientos de la moderna cartografía temática. El atlas comprende siete volúmenes en cuarto titulados sucesivamente Geographia naturalis (pars I) [BH FLL 30536(1)]; Geographia hierarchica (pars II) [BH FLL 30537], Atlas marianus (pars III) [BH FLL 30536(2)], Geographia politica (pars IV) [BH FLL 30538 y BH FLL 30539], Geographia artificialis (pars V) [BH FLL 30540], Tabellae geographicae (pars VI) [BH FLL 30541] y Critica Quadrapartita (pars VII) [BH FLL 30542]. En la Biblioteca Histórica se conservan los ejemplares de la edición de 1737 en Munich, en cuarto, con ex libris de la Biblioteca Complutense y procedentes del Colegio Máximo de Alcalá perteneciente a la Compañía de Jesús.
La mayoría de los más de 180 mapas -algunos repetidos- se prepararon entre 1699 y 1700 y fueron grabados por Leonard Hecknaeur, Joseph Montelegre y Matthus Wolfgang, autores también de los bellísimos frontispicios alegóricos que adornan cada volumen, así como de la exuberante iconografía barroca de clara inspiración católica que adorna sus mapas y que compiten en riqueza decorativa y belleza con los mejores de su tiempo. Desde este punto de vista la obra de Heinrich Scherer se puede considerar como la réplica católica, llena de espíritu de la Contrarreforma, a la iconografía protestante que animaba a los famosos atlas holandeses, como los de los Blaeu, que habían inundado Europa con sus mapas ricamente decorados con imágenes profanas sin apenas referencia espiritual o religiosa. Por el contrario, Heinrich Scherer llena sus mapas con imágenes de una religiosidad intensa y vibrante, plagada de santos jesuitas y vírgenes misericordiosas. Además, como no podía ser de otro modo, varios de sus volúmenes están dedicados a desarrollar la geografía religiosa (Geographia hierarchica (pars II) y Atlas marianus (pars III)) en la que se refleja especialmente la historia y desarrollo de la Compañía de Jesús y sus esfuerzos misioneros en América del Norte y del Sur, el Sudeste Asiático y el Lejano Oriente.
Al margen de los aspectos decorativos y religiosos de los mapas y de su limitado interés geográfico -muchos están muy desfasados e ignoran las novedades de la cartografía de su tiempo- la obra de Heinrich Scherer destaca por haber desarrollado la cartografía temática de un modo que antes apenas se había explorado. En su Geographia naturalis se incluyen mapas que eliminan las fronteras políticas, y nombres de lugares, para mostrar únicamente las montañas y los bosques, los principales cursos de agua y las cuencas hidrográficas centrándose únicamente en las características físicas y topográficas de las regiones representadas. En esto siempre se ha visto la influencia de otro destacado escritor jesuita del siglo XVII Athanathius Kircher, que publicó uno de los primeros mapas temáticos que muestran las corrientes oceánicas, cordilleras y volcanes activos del mundo en su Mundus Subterraneus de 1665. Heinrich Scherer fue uno de los fundadores del renacimiento cartográfico alemán del siglo XVIII que tuvo brillantes continuadores en los años siguientes en las figuras de Johann Baptist Homann, Seutter Mattheus o Johann Christoph Weigel.