Real Jardín Botánico (Madrid)
Esta institución fue fundada por el rey Fernando VI en 1755 y, en un principio, se encontraba ubicada en las afueras de Madrid, en el sitio de Migas Calientes, camino de El Pardo.
Carlos III, en 1774, ordenó su traslado a las Huertas del Prado Viejo de Atocha, lugar que actualmente ocupa, y el Jardín Botánico comenzó a funcionar en 1781, contando, desde esa fecha, con una biblioteca de 250 volúmenes, a los que se agregó la colección del botánico Quer. Llegó a contar con un total de 1000 obras entre las que destacaban dibujos, documentos de expediciones científicas y una importante colección de manuscritos.
El 1 de octubre de 1815 se creó el Real Museo de Ciencias Naturales de Madrid, englobando al Real Gabinete junto con el Real Jardín Botánico, el Real Laboratorio de Química y el Real Estudio de Mineralogía, a los que posterirmente se agregó el Real Observatorio Astronómico. En 1847 se aprobó un reglamento incorporando el Museo y el Jardín Botánico a la Universidad de Madrid. A partir de entonces, sus bibliotecas se conviertieron de facto en las de las secciones de Ciencias de la Facultad de Filosofía y más adelante, a partir de su creación, en 1857, en las de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales.
En 1867 el Jardín Botánico se independiza del Museo de Ciencias y su director, José Bahamonde, organiza y clasifica la biblioteca creando un índice de autores que cuenta ya con 2000 papeletas de libros sobre Botánica y Agricultura.
A partir de ese momento, los fondos de la biblioteca se van incrementando con compras y donativos, escasos pero muy valiosos, si bien la falta de medios, personal e instalaciones se hicieron notar durante toda la segunda mitad del siglo XIX hasta que una real orden de 1897 divide la Biblioteca Universitaria de Madrid en ocho establecimientos autónomos, uno de los cuales va a ser la Biblioteca de Ciencias, y otra orden de 1898 dispone que la Biblioteca Agrícoloa se traslade también a la Biblioteca del Jardín Botánico que, desde entonces, es mencionada muchas veces como Biblioteca del Botánico y Agrícola.
Finalmente, en el 1900 se reorganizan los estudios de la Facultad de Ciencias y en 1902 se crea su propia biblioteca que terminará integrando en ella los fondos del Museo de Ciencias Naturales y los del Jardín Botánico.
Bibliografía:
- Historia de la Biblioteca de la Universidad Complutense de Madrid. Madrid : Editorial Complutense, 2007