Páez de Castro, Juan, 1512?-1570
Juan Paéz de Castro fue una importante figura del Humanismo español. Reconocido helenista y cronista oficial de Carlos V y Felipe II, se distinguió también por su amor a los libros y a las bibliotecas. De su conocimiento y valoración nos ha dejado múltiples testimonios en sus escritos. Conoció a importantes eruditos y bibliófilos contemporáneos con los que compartió no sólo una intensa actividad intelectual, sino también la riqueza de sus bibliotecas. Tal es el caso de Antonio Agustín, eminente jurista o del historiador Jerónimo Zurita con el probablemente coincidiera en sus estudios en la Universidad de Alcalá, con el que mantuvo una estrecha amistad y una intensa correspondencia a lo largo de toda su vida.
Páez de Castro nació en Quer, pequeña localidad situada en la provincia de Guadalajara hacia 1510. Formado en leyes, historia y ciencias matemáticas, poseía también amplios conocimientos de las lenguas griega y latina, además de la hebrea y caldea. Los datos que conocemos de su formación son los que él mismo nos proporciona en el Método para escribir la historia, memorial dirigido a Carlos V , que redacta poco después de su nombramiento como cronista del emperador en el año 1557.
En 1545 entra al servicio de D. Francisco de Vargas, jurista y fiscal de su majestad, que acude a Trento como asistente al Concilio. Allí, Páez de Castro conocerá a Diego Hurtado de Mendoza, gran bibliófilo y embajador en Venecia, ciudad en la que este último formó una de las mejores bibliotecas humanistas de la época. Esta biblioteca fue muy frecuentada por Páez y, por lo tanto, tuvo ocasión de conocer la importante colección de manuscritos griegos pertenecientes al diplomático español.
Al finalizar la etapa tridentina, Páez se traslada a Roma como secretario del obispo de Coria, Francisco de Mendoza y Bovadilla Entre sus funciones estaba la de encargarse de su biblioteca. De nuevo establece contactos con los círculos de intelectuales romanos. Mecenas y humanistas de la talla del doctor Juan de Aguilera, Domingo de Soto, el médico Luis de Lucena. y en especial se relaciona con el Arzobispo de Tarragona, Antonio Agustín, eminente canonista y bibliófilo, poseedor de una magnífica colección de códices griegos y latinos de derecho y teología.
En esa etapa de su vida Paez conocerá de primera mano importantes bibliotecas privadas como la de Pietro Bembo, Niccolò Leoniceno, la del cardenal Mendoza, pero también tendrá acceso a las bibliotecas del Papa y de algunos cardenales destacados en Roma.
Acompañando a Francisco de Mendoza le encontramos en Bruselas en 1554. Con él recorrerá distintas ciudades europeas. A la muerte del Papa Julio III, el cardenal Mendoza volverá a Roma pero Paéz permanecerá en Bruselas dónde finalmente es nombrado, en 1555, cronista en latín y capellán oficial del emperador Carlos. El mismo cargo lo desempeñará al servicio de su hijo y sucesor Felipe II. a quien dirige el conocido memorial «Sobre la utilidad de juntar una buena biblioteca» En este Memorial nos dejará su propuesta sobre como formar una biblioteca,
“como de los libros penden todas las artes e industrias humanas, y en cuanto peligro están de perderse si no se da algún medio para que se guarden en lugar seguro”
Recomendaciones que, sin duda, el monarca tuvo en consideración a la hora de fundar la Biblioteca de El Escorial.
Durante sus años de cronista fue recopilando el material necesario para escribir una historia de España. En 1559 abandonó la Corte y se instala en su pueblo natal donde permanecerá hasta su muerte. Su vinculación con Felipe II en materia literaria siguió siendo muy grande, el rey le pidió consejo en reiteradas ocasiones sobre temas culturales. A su muerte, Felipe II ordenó adquirir sus libros para la biblioteca de El Escorial.
Su biblioteca personal está actualmente dispersa por las principales bibliotecas históricas de España. En la Biblioteca Histórica de la UCM se conserva la parte primera de la Historia romana del historiador del siglo III D.C. Dión Casio. Esta obra fue editada en París en la imprenta de Roberti Stephani en 1551. y tiene signatura BH DER 2301
Este ejemplar presenta el ex libris manuscrito de Paéz de Castro en la portada. Se encuentra referenciado en uno de los inventarios de los libros seleccionados a su muerte por Ambrosio de Morales para la Real Biblioteca escurialense..
Está encuadernado en pergamino flexible con correíllas, título manuscrito y cortes sin colorear. Contiene anotaciones marginales de Paéz. Contiene también, ex libris manuscritos de antiguos poseedores posteriores a Paéz que se transcriben: “librería de Luis Carrillo y “librería del Colegio de la Compañía de Jesus de Alcalá , año de 1705”
Bibliografía:
Categoría: Eruditos, Religiosos, Historiadores, Bibliófilos
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