Don Quixote de la Mancha, Madrid, 1780
El ingenioso hidalgo don Quixote de la Mancha
Madrid, Joaquín Ibarra, 1780
BH FLL Res.1221 (vol. 4)
Antes de morir y recuperado el juicio, Alonso Quijano el Bueno dicta testamento, donde hace repaso de sus escasos bienes que reparte con generosidad. Y ahora solo le queda morir.
Andaba la casa alborotada; pero, con todo, comía la sobrina, brindaba el ama, y se regocijaba Sancho Panza; que esto del heredar algo borra o templa en el heredero la memoria de la pena que es razón que deje el muerto (D.Q, II, cap. 74)