La enseñanza del hebreo en Alcalá:. De litteris hebraicis
Antonio de Nebrija (1444-1522).
De litteris hebraicis. Cum quibusdam annotationibus in Scripturam Sacram.
Alcalá de Henares: Arnao Guillén de Brocar, ca. 1515. 4º. 16 fols. Libro. Papel.
Biblioteca Histórica de la UCM. BH FLL 22130(2).
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La tradición de hebraísmo en la península Ibérica es a la vez tanto castiza y fruto de la problemática convivencia secular de las tres principales religiones abrahámicas en el suelo de la península, como insertada, tanto por sus precedentes como por sus descendientes intelectuales, en la tradición mayor de la cultura europea del primer Renacimiento y la Edad Moderna. La vocación hebraísta, algo tardía, del príncipe de los gramáticos castellanos, Elio Antonio de Nebrija, puede ser prueba de este aserto. El ejemplar expuesto es el tratadito de éste sobre la ortología de la lengua santa, el alfabeto hebreo, el valor fonético de sus letras y el significado y uso de las mismas (De litteris hebraicis), las voces hebreas y arameas (impresas en alfabeto hebreo y con una discusión de cada una en latín) que se encuentran en el Nuevo Testamento (Dictiones hebraice in testamento nouo) y un listado final de nomina hebraica (“nombres[ propios ] hebreos”), en la tradición medieval de los estudios bíblicos cristianos y de la mayor parte de los manuscritos bíblicos latinos medievales en todo el Occidente cristiano. Estas interpretationes nominum hebraicorum consisten en un glosario de nombres propios, hebreos y arameos principalmente, que aparecen tal cual en la traducción latina y que son indeclinables, por lo que podrían conducir a diversos problemas de interpretación si se recurriera a una exégesis basada exclusivamente en las reglas morfosintácticas del hebreo y del arameo; además, y como es de sobra conocido, los nombres proprios acarrean un significado exegético que muchas veces es explícito en el texto bíblico.
De esta obra se han constatado dos ediciones exentas, ambas alcalaínas, una fechada alrededor de 1515 (que es la expuesta) y otra, más tardía, de 1528, fallecido ya el autor. Los tipos hebreos y latinos utilizados en esta primera edición alcalaína exenta del tratadito son los mismos utilizados en la Políglota, los usados poco tiempo después en las ediciones de las polémicas del complutense Diego López de Zúñiga contra Erasmo y los empleados once años después en la impresión de la gramática hebrea de Alfonso de Zamora, Introductiones artis grammatice hebraice nunc recenter edite, de la que también se expone un ejemplar. Entre 1520 y 1560 se cuentan otras dieciocho ediciones en las que el tratadito aparece como apéndice de la exitosísima gramática latina de Nebrija, las Introductiones latinae, llamado en los repertorios bibliográficos, catálogos e inventarios del mundo hispánico de ambas orillas del Atlántico en los tres siglos siguientes a su publicación el “Arte de Antonio” por antonomasia. Contra lo que han argüído algunos estudiosos, no hay constancia de que los conocimientos de hebreo y arameo de Nebrija procedan de su crucial etapa de formación en Italia; la tradición lingüística que presenta en sus obras es propia de la cultura judía ibérica y se apoya asimismo cuando lo juzga necesario en la comparación con, por ejemplo, las reglas y los signos diacríticos supralineares e infralineares del hebreo con el árabe, siguiendo en este último caso la tradición gramatical andalusí propia de la península Ibérica.
El trato de Nebrija con los hebraístas conversos del equipo de la Políglota puede calificarse de íntimo y fue temprano. La Tertia quincuagena es un tratado breve (32 folios) pero sustancial sobre problemas filólogicos tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento. Su primera edición se publicó en Alcalá en 1516: es pues una impresión coetánea tanto de la Políglota como de la obra expuesta de Nebrija. La obra se organiza por lemas, términos filológicamente discutibles del texto bíblico, que Nebrija discute a continuación; en la entrada correspondiente a talitha/tabitha (véase Marcos, 5:41 y Hechos 9:36), el andaluz a la autoridad de un «Maestro Pablo, hombre [ poseedor ] de ambas lenguas, versado en la aramea y erudito en la hebrea» [ magistro Paulo viro vtriusque lingue arameam dico atque hebraicam erudito ]. Caben pocas dudas de que este Maestro Pablo corresponda al hebraísta converso Pablo Núñez Coronel, llamado de forma constante “Maestro Pablo” tanto en las fuentes alcalaínas como en las salmantinas más tardías. La cercanía del andaluz Nebrija con el leonés Alfonso de Zamora fue no solo probablemente intelectual sino con seguridad física: las casas de las que ambos fueron inquilinos en Alcalá durante por lo menos una década fueron contiguas. El latinista y el hebraísta fueron pues compañeros de claustro, autores publicados por la misma imprenta y convecinos pared con pared.
JPP
Bibliografía: Virginia BONMATÍ SÁNCHEZ. “La Filología Bíblica del humanista Elio Antonio de Nebrija (1444-1522)”, Studia Philologica Valentina, vol. 10, nº 7 (2007), pp. 47-63; Ignacio Miguel Ángel ESPARZA TORRES y Hans-Josef NIEDEREHE. Bibliografia Nebrisense. Las obras completas del humanista Antonio de Nebrija desde 1481 hasta nuestros días. Amsterdam/Philadelphia: John Benjamins Publishing Company, 1999; Natalio FERNÁNDEZ MARCOS. Filología bíblica y humanismo, Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto de Filología, 2012; Julián MARTÍN ABAD. La imprenta en Alcalá de Henares (1502-1600), Madrid: Arco Libros, 1991, 3 vols; I, nº 37; Antonio ODRIOZOLA. “La caracola del bibliófilo nebrisense”, Revista de. Bibliografía Nacional 7, (1946), pp. 3-114; Antonio de la TORRE Y DEL CERRO. “La casa de Nebrija en Alcalá de Henares y la Casa de la Imprenta de la «Biblia Políglota Complutense»”, Miscelánea Nebrija. Emérita, 13 (1945), pp. 175-182; Carlos del VALLE RODRÍ- GUEZ. Corpus Hebraicum Nebrissense. La obra hebraica de Antonio de Nebrija, Madrid: Aben Ezra, 2000.