Manuscritos latinos y castellanos
Los códices latinos y castellanos son los más abundantes. El códice más antiguo conservado en la Biblioteca Complutense es el precioso poema caligráfico de Rabano Mauro De laudibus crucis, fechado en el siglo IX.
Imagen: Rabano Mauro. De laudibus crucis. 780?-856 [BH MSS 131]
Pero el códice considerado más valioso de entre las colecciones que guarda la Biblioteca Complutense es el original del escritorio alfonsí,los Libros del saber de astronomía de Alfonso X el Sabio , del siglo XIII, una de las cumbres del libro científico medieval en España poblado de bellas ilustraciones miniadas de instrumentos astrológicos y constelaciones.
Otros códices muy destacados son la Biblia mozárabe del siglo X o el Breviarium historiae catholicae de Ximenez de Rada, del siglo XIII con una magnífica miniatura que representa el Arca de Noé. También en la categoría de manuscritos iluminados destacan el Comentario al Cantar de los Cantares del siglo XI, las Epístolas de San Pablo del siglo XIII, o una Biblia del siglo XIII, quizás copiada en el Monasterio de Montecassino, procedente de la colección Francisco Guerra y decorada con semiorlas con imágenes sagradas y animales y varios tipos de iniciales. Otras obras de autores como Aristóteles, San Jerónimo, Plutarco, César, Eusebio de Cesarea, Esopo, Martinus Polonus, Ramon Llul o Francesc Eiximenis pertenecen también a la colección de códices medievales.
Imagen: Breviarium historiaecatholicae. S.XIII [BH MSS 138]
Colección de diplomas de la Escuela Superior de Diplomática de Madrid
En la Biblioteca Histórica de la Universidad Complutense de Madrid se custodian 192 pergaminos manuscritos de la Escuela Superior de Diplomática de Madrid.
Se trata de los diplomas que utilizaba la Escuela como material científico para el aprendizaje en la asignatura de Ejercicios Prácticos. Debido al interés que despierta esta singular colección de Diplomas, por su antigüedad y variada tipología documental (bulas pontificias, documentos procedentes de monasterios, escrituras, testamentos, censuales, cartas...) que abarca desde el siglo XII hasta el siglo XVIII, se han incorporado al catálogo de Fondo Antiguo, partiendo de un índice mecanografiado realizado por Manuel Sánchez Mariana. Los datos que ofrece este inventario son breves pero suficientes para identificarlos: data, nombre de la localidad, orden, monasterio o iglesia y tipo de documento. Hasta la fecha es el único instrumento descriptivo con el que se cuenta para este conjunto documental de extraordinario valor, a la espera de su trascripción y análisis paleográfico y codicológico. La digitalización de esta notable colección no se ha hecho esperar, y como objetos digitales forman parte del repositorio E-prints Complutense accesible libremente a través de internet.
Imagen: Documento en pergamino, Roma, 7 de agosto de 1632 [BH GRA 96(11)]