Biblioteca Complutense

Las (nuevas) aventuras de don Quijote y de Sancho Panza. 2

-Así es -respondió la barbada condesa-, pero todavía le cuadra mucho, porque se llama Clavileñoel Alígero, cuyo nombre conviene con el ser de leño, y con la clavija que trae en la frente, y con la ligereza con que camina; y así, en cuanto al nombre, bien puede competir con el famoso Rocinante.
-No me descontenta el nombre -replicó Sancho-, pero ¿con qué freno o con qué jáquima se gobierna?
-Ya he dicho -respondió la Trifaldi- que con la clavija, que, volviéndola a una parte o a otra, el caballero que va encima le hace caminar como quiere, o ya por los aires, o ya rastreando y casi barriendo la tierra, o por el medio, que es el que se busca y se ha de tener en todas las acciones bien ordenadas. (Don Quijote, II, cap. 40)
   

Don Quixote de la Mancha, Madrid, 1723

 

El País, 1 de junio de 2013

 

Don Quichotte, París, 1774

 

El País, 17 de marzo de 2005

El País, 20 de octubre de 2007

Don Quixote de la Mancha, Londres, 1738

 

El País, 22 de enero 2014