Las (nuevas) aventuras de don Quijote y de Sancho Panza. 1
En esto, oyeron un gran ruido en el aposento, y que don Quijote decía a voces:
-¡Tente, ladrón, malandrín, follón, que aquí te tengo, y no te ha de valer tu cimitarra!
Y parecía que daba grandes cuchilladas por las paredes. Y dijo Sancho:
-No tienen que pararse a escuchar, sino entren a despartir la pelea, o a ayudar a mi amo; aunque ya no será menester, porque, sin duda alguna, el gigante está ya muerto, y dando cuenta a Dios de su pasada y mala vida, que yo vi correr la sangre por el suelo, y la cabeza cortada y caída a un lado, que es tamaña como un gran cuero de vino. (Don Quijote, I, cap. 35)
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Don Quijote de la Mancha, Barcelona, 1930
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El País, 26 de octubre 2009
El País, 8 de diciembre 2013
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