Biblioteca Complutense

Biblias españolas y biblias ilustradas: Biblia del Oso

[Biblia del Oso]

La Biblia que es los Sacros libros del vieio y nueuo testamento, trasladada en español [por Casiodoro de Reina].

[S.l.]: en la libreria de Daniel y David Aubrij y de Clement Schleich, 1622. 4º. Libro. Papel.

Biblioteca Histórica de la UCM. BH FG 3796

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La segunda traducción de la Biblia al castellano, aunque considerada la primera completa, fue la llamada Biblia del Oso, a cargo de Casiodoro de Reina, monje jerónimo católico perseguido por la Inquisición por compartir los ideales de la reforma, y que fue publicada en Basilea en 1569, por Tomás Guarino. En su portada aparecía la la marca del “oso” intentando dar cuenta de un panal de miel, ilustración que dio nombre a la Biblia. Para el Antiguo Testamento partió del texto hebreo, aunque también se ayudó de la Biblia de Ferrara. Para el Nuevo Testamento utilizó, entre otras, la versión de Erasmus y la de la Biblia Políglota Complutense. La Biblia de Casiodoro ha sido muy valorada por el uso de la lengua, por su belleza y riqueza y, en palabras de Antonio Muñoz Molina, constituye una de las cimas literarias de la lengua española:

… es una lengua poseída por la misma capacidad de crudeza terrenal y altos vuelos literarios de La Celestina; un castellano mudéjar, empapado todavía de árabe y de hebreo, forzado en sus límites sintácticos para adaptarse a las cadencias y las repeticiones y las exageraciones de la lengua bíblica. Es una lengua de campesinos, de hortelanos, de trabajadores manuales, con una precisión magnífica en los nombres de las cosas naturales y los oficios; y también es una lengua todavía muy descarada, muy sensual, no sometida a la monotonía sofocante de la ortodoxia, a la esterilización dictada por el miedo, a la hipocresía de la conformidad. Es una lengua para ser recitada, entonada, cantada en voz alta; para expresar la furia tan desatadamente como el deseo erótico; y también las negruras de la pesadumbre y los extremos del dolor…

Y continúa Muñoz Molina su valoración de la obra:

Una de las cimas literarias de la lengua española, la Biblia traducida en el siglo XVI, ha sido invisible o ha permanecido en los márgenes de nuestra cultura desde el momento mismo en que se publicó, y no ha podido ejercer ninguna influencia vivificadora; uno de nuestros más grandes escritores, su traductor, fue perseguido hasta el extremo de que su nombre fue borrado por completo de nuestra memoria colectiva…

La Biblioteca Histórica posee una emisión de la misma edición que tiene como único añadido una portada nueva fechada en 1622, aunque hay que hacer la salvedad de que existen al menos dos portadas con fecha de 1622. Una con la marca del “oso”, y otra con la marca de un “pegaso” de la librería de Daniel y David Aubrij y de Clement Schleich. De esta última es el ejemplar de la Biblioteca Histórica que se expone.

MTSD

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Bibliografía: María Dolores ALONSO REY. “Los emblemas de las Biblias del Oso y del Cántaro. Hipótesis interpretativa”, Imago. Revista de Emblemática y Cultura Visual, 4 (2012), pp. 55-61; Natalio FERNÁNDEZ MARCOS. Filología Bíblica y Humanismo, Madrid: CSIC, 2012; Antonio MUÑOZ MOLINA. "La obra maestra escondida", en Babelia, El Pais, 26 de julio, 2014; Rafael SERRANO. Historia de la Biblia en español. Raleigh: Lulu Press, 2014.