Siglo XVII. Francia
La cartografía francesa del siglo XVII en las colecciones complutenses
Tras un siglo XVI lleno de turbulencias y guerras religiosas que no favorecieron el desarrollo de la cartografía, Francia encaró el siglo XVII con una mayor estabilidad social y grandes cambios políticos, de tal modo que, bajo los gobiernos absolutistas de Luis XIII y Luis XIV, la producción cartográfica adquirió un nivel de protección, amparo y mecenazgo estatal desconocido en la Europa del momento y que, con los años, situaron al país galo a la cabeza de Europa. Así, avanzada la centuria, Francia se convirtió en el centro de la ciencia geográfica y sus cartógrafos, bajo el amparo de instituciones científicas como la Academie des Sciences, comenzaron a producir los mapas más avanzados y precisos del momento. La Biblioteca Histórica custodia algunos notables ejemplares de este resurgir de la cartografía francesa: de la primera mitad podemos anotar dos volúmenes con vistas de ciudades de Nicolas Tassin, mientras que de la segunda mitad llaman la atención las ilustradas obras de Alain Manesson Mallet y, sobre todo, la obra de uno de los iniciadores de este brillante periodo de la cartografía francesa, Nicolas Sanson. A imitación de las dinastías holandesas del siglo XVII, Sanson fundó un negocio cartográfico que fue continuado por sus hijos y nietos y prosperó durante más de un siglo. En las colecciones complutenses figura un enorme y bellísimo Atlas suyo, editado por sus sucesores en alianza con otra de las grandes dinastías francesas del cambio de siglo: los Jaillot.