La Cátedra de Psicología Experimental
Luis Simarro obtuvo la Cátedra de Psicología Experimental en 1902 presentándose a estas oposiciones con una memoria sobre La Iteración. Una década antes se había presentado en Madrid a la plaza de Histología e Histoquímica Normal y Anatomía Patológica que había ganado Ramón y Cajal. El turnismo de finales del XIX en España facilitó la duplicación de Cátedra de Psicología. El ministro García Alix justifica la enseñanza de la psicología científica porque “era reclamada por Filósofos, Médicos y Naturalistas” (RD, 4-VIII-1900).
La nueva Cátedra era de corte experimental y ajena a la filosofía escolástica ya existente en las Facultades de Letras. La Cátedra de Psicología Experimental estaba adscrita a la Facultad de Ciencias (Sección de Naturales). La asignatura era cursada por alumnos de Doctorado de Ciencias, Medicina y Filosofía y Letras. Durante dos décadas mas de dos mil doscientos alumnos pasaron por sus clases, siendo médicos la mayoría (92%) y el resto de Ciencias Naturales (6%) y Filosofía y Letras (2%). “Probablemente, dice el profesor Yela, fue el primer profesor de Psicología Experimental de una sección de Ciencias en todo el mundo”.
¿Cómo era Simarro en el aula? Viqueira en "La Psicología contemporánea" (1930) nos dice: «Fue un maestro admirable, en su clase y fuera de su clase. Sus discípulos le visitábamos muy a menudo, y en sus largas conversaciones con él, que se extendían a todas las esferas del saber humano y estaban impregnadas de espíritu filosófico, hemos encontrado un cúmulo de sugestiones y cultura. Simarro tenía el don de conversar; su clase misma era una conversación, un admirable diálogo que raras veces se trocaba en monólogo.
Fotografía en la orla de la Facultad de Filosofía y Letras, Sección de Filosofía, de la Universidad Central. Año 1914