Cartografía española del siglo XVIII en las colecciones complutenses

A pesar de algunos notables intentos, durante los siglos XVI y XVII no se llegó a publicar en España ningún atlas impreso del territorio nacional o de las posesiones ultramarinas, como si ocurrió en otros países de nuestro entorno. Esta carencia fue cubierta parcialmente por los numerosos atlas generales publicados sobre todo en los Países Bajos o Italia y, ya más tarde, en Francia, muchos de los cuales incluyeron mapas no sólo de la península ibérica sino también de varias regiones españolas. Algunos de estos atlas fueron traducidos al español como ocurrió con las ediciones del Theatrum de Ortelius de 1588, 1602 y 1612, o la del Atlas Maior Blaeu en 1659, entre otras menos importantes. Sin embargo, hay que esperar al siglo XVIII para encontrar en España iniciativas editoriales autóctonas que culminaran con éxito.

Aunque no llegó a la imprenta, entre los primeros intentos del siglo XVIII interesa destacar el mapa manuscrito de la península ibérica perteneciente a la Real Sociedad Geográfica, que se conserva en la Biblioteca Nacional y que trazaron entre 1739 y 1743, a iniciativa del Marqués de la Ensenada, dos profesores  jesuitas del Colegio Imperial de Madrid, los padres Jesús Carlos Martínez y Claudio de la Vega. El trabajo, compilado a partir de varias fuentes, no resultó muy satisfactorio y quedó incompleto, pero sin lugar a dudas refleja la preparación e interés por los conocimientos geográficos de los miembros de la Compañía de Jesús que contaban en las bibliotecas del Colegio Imperial con numerosos atlas, hoy conservados en las colecciones complutenses.   

En cambio en las colecciones de la Biblioteca Histórica sí están presentes  algunos notables ejemplares pertenecientes a los empeños cartográficos españoles más importantes del siglo XVIII. Aunque incompleta, es de destacar, la colección de mapas sueltos del autor español más importante del siglo XVIII, Tomás López, quien realizó mapas de todos los reinos, provincias, partidos y ciudades de España. Nuestros ejemplares pertenecen a las ediciones más tardías, que a su muerte y bajo el título Atlas Geográfico de España, publicaron sus hijos en 1804, 1810 y 1830. Igualmente sobresale en nuestros fondos el primer atlas de las costas españolas, obra de Vicente Tofiño de San Miguel, titulado Atlas Marítimo Español, publicado en 1789 y la memoria correspondiente, con el título Derrotero de las costas de España. En la Facultad de Geografía e Historia se expone un magnífico ejemplar de mapa mural -el único de este tipo conservado en las colecciones complutenses- del Mapa de la América Meridional de 1775 de Juan de la Cruz Cano y Olmedilla, que esta unánimemente considerado como el más completo y bello que se ha realizado sobre América del Sur hasta la utilización de métodos cartográficos contemporáneos. Todas estas obras tuvieron una influencia considerable y llenaron el vacío cartográfico existente en España hasta la fecha.